LACTOSA: YA HABÍAMOS APUNTADO ALGO

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El tema de la lactosa de la leche y la intolerancia que presentan a la misma algunas personas, ya se ha tratado aquí en lamarga en algún post y sus comentarios (este, este y este otro). De hecho, ya se reseñaron estudios que apuntaban a que gran parte de los intolerantes a la lactosa no tienen necesidad de cambiar radicalmente su dieta y eliminar los lácteos; es más, ese cambio les supondría un inconveniente nutricional importante, ya que la leche es una buena fuente de un importante número de nutrientes que habría que buscar en otro lado si se elimina de la dieta. Y eso es lo que afirman ahora de manera más contundente en un informe elaborado por un panel de expertos del Instituto Nacional de Salud de los Estados Unido de América (NIH).

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ES POSIBLE QUE NO SEA PARA TANTO

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O al menos no tan grave. En un estudio publicado en “Nutrition Today”, se pone de manifiesto que las actuales cifras de intolerancia a la lactosa que se barajan son seguramente muy superiores a las reales. En el estudio, se obtuvieron cifras de aproximadamente un 7% para blancos (“European Americans”), un 10% para hispanos (“Mexican Americans”) y un 19.5% para negros (“African Americans”) cuando las cifras que vienen maneando hablan de un 15%, un 50% y un 80% respectivamente. En España las cifras que se manejan son de en torno al 15%, aunque en algún estudio que hoy no he sido capaz de encontrar, se llegaban a mencionar niveles cercanos ¡¡al 40%!!.

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LEYENDAS: UNA DE LACTOSA

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Tal vez la nutrición y los alimentos sean los ámbitos en los que mayor número de leyendas urbanas existen. Algunas, aunque peregrinas, llegan a tener una gran repercusión, como aquella que decía que los números que aparecen en los cartones de leche hacen referencia al número de veces que la leche ha sido devuelta a la industria y vuelta a procesar. Otras intentan tener un soporte científico, para lo que se suelen escoger un par de términos que tengan que ver con la bioquímica, la química o la fisiología, se barajan adecuadamente, y se consigue de esta manera una pátina de verosimilitud. En esta categoría entra de lleno la última leyenda que he oído.

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UN PAR DE “EN CONTRA DE LA OPINIÓN GENERALIZADA”

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1.- Unos científicos británicos han comprobado que el consumo temprano de frutos secos (concretamente de cacahuetes) puede reducir la probabilidad de sufrir alergia a ese alimento (publicado en el Journal of Allergy and Clinical Immunology). La recomendación más generalizada en la actualidad (en el Reino Unido al menos, desconozco el caso de España) es que no se coman cacahuetes durante el embarazo, la lactancia y los primeros años de vida. El estudio se ha llevado a cabo comparando las tasas de alergia a los cacahuetes entre el Reino Unido e Israel, donde un 69% de los niños de ¡9 meses! ya consumen este fruto seco (me imagino que en forma de papilla, pero aún y así, me parece tremendamente alta la cifra). Pues bien, los niños Israelíes mostraron una prevalencia de este padecimiento del 0.17%, mientras que la cifra era más de 10 veces superior (1,85%) en los británicos. Las alergias alimentarias han aumentado muchísimo en los últimos años (se habla de 2.5 millones de personas entre USA y UE), y la de los cacahuetes es de las más comunes. Bueno, tal y como se comenta en el artículo, los resultados son prometedores, pero habrá que contrastarlos con estudios bioquímicos más específicos. Los estudios epidemiológicos (los que se basan en cifras obtenidas de la población) son necesarios para encontrar pistas, pero jamás pueden servir para afirmar tajantemente la causa de una enfermedad (o del efecto positivo o negativo de un alimento). Por ejemplo (un estudio que me invento): los españoles consumimos 13 litros de aceite de oliva al año, y sin embargo los habitantes de Eritrea apenas lo consumen. La esperanza de vida en España es de 85 años, mientras que en Eritrea es de 59 años; ergo, el aceite de oliva aumenta la esperanza de vida (es una simplificación estúpida, pero intenta ejemplificar por qué los estudios epidemiológicos hay que hacerlos muy bien y tomar sus resultados con pinzas).

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