SI ESTÁS PREÑADA, COME PESCADO. O NO.

imageLa información científica puede volver esquizofrénico a más de uno. Sobre todo cuando se relaciona con lo que más preocupa a una parte importante de la población: los hijos. Han visto la luz en estos días un estudio que relacionan el consumo de pescado durante el embarazo con la inteligencia que una vez nacidos muestran los niños. Ya existían estudios previos, pero los nuevos abarca un número mucho mayor de casos (lo que confiere más fiabilidad a los resultados), y se refieren específicamente al pescado (y no a suplementos de ácidos grasos omega-3 en forma de píldoras). En realidad, los resultados tienen su lógica, ya que en el desrrollo del tejido nervioso en el sistema nervioso central (cerebro), el papel de este tipo de ácidos grasos parece muy importante.
Sin embargo, a lo sumo hace un par de meses, llenaron las portadas de los medios de comunicación informes advirtiendo del peligro de comer pescado durante el embarazo, por los altos niveles que contiene de mercurio y otros metales pesados y residuos de la producción industrial. Este hecho podía conducir a una mayor tasa de deformidades en los fetos (esto ya nos lo decían a nosotros en USA en 1999). ¡¡¿¿Qué hacer??!!
Por otra parte, si se lleva todo esto al extremo, me imagino el futuro lleno de inteligentísimos humanos deformes con enormes cerebros que no quepan en su cabeza, como en una película de ciencia ficción.