De sobra sabes que eres la primera, que no miento si juro que daría por ti la vida entera. Y sin embargo, un rato cada día, ya ves, te engañaría con cualquiera. (J. Sabina, o tú, o yo)
Hoy cumplo 37 años y el sol está pegando fuerte. Tal vez las dos cosas me llevan a ser políticamente poco correcto en un día como hoy y compartir un poquito de mi perturbación.
Supongo que ya alguien lo habrá dicho en alguna ocasión pero no está mal repetirlo ahora: el tiempo es mentiroso. He pasado mucho tiempo en la calle y he visto que muchas chiquitas (algunas de ellas deberían vivir dos veces la vida que ya han vivido para acercarse a mi edad) han sacado sus camisetas del armario y han aparcado prendas más discretas y protectoras del frío. Como dije antes, el tiempo nos miente. Hoy cumplo 37 años pero os juros que me he sentido como si tuviera 36.
Y sin embargo…
Yo lo noto: cómo me voy volviendo
menos cierto, confuso,
disolviéndome en aire
cotidiano, burdo
jirón de mí, deshilachado
y roto por los puños.
Yo comprendo: he vivido
un año más, y eso es muy duro.
¡Mover el corazón todos los días
casi cien veces por minuto!
(
Ante todo, felicidades.
Tu texto me provoca desasosiego de 22ºC y tarde de paseo desaprovechada tras los cristales. Es decir, estaba deseando leer algo así.
Felicidades Cerrino,
el paso del tiempò, eso si que es un tema complicado y dificil de sujetar. Ayer me sentí viejo al ver que se había hecho un museo de reliquias deportivas, algo así como elementos de la antiguedad que tenían valor sentimental más que real. No sé cuáles eran las mas valiosas, pero las que el periódico reflejaba no eran desconocidas para mi. Las zaptillas de Fernando Martín (unas converse) y Drazen Pretrovic estaban en una vitrina ¡¡¡como antiguedades!!!. Cerré el panfleto que estaba leyendo y me fui indignado.
Una verguenza.
Felicidades chaval.
¡Felicidades!! Qué bien aprovechado el poema, demoledor como no podía ser menos.
Precioso post
De verdad, me encanta ser la primera pero lo que tengo muy claro es que quiero ser la última con la que cumplas años.
Mañana me pongo camiseta, chuuuuuuuurrrrrrrrrrri.
Hola Cerrino
Felicidades. A mí todavía me quedan meses.
Tengo un disco de Pedro Guerra que canta y
Me alegra saber que no cambiarías tu vida por la de nadie, porque espero tener un hueco en ella. Cuando pase mucho más tiempo y seas un viejito apacible y feliz, y recuerdes lo joven que eras a los 37, quiero mi parcelita de recuerdo.
37? !pero si eres un chaval!
FELICIDADES!
Felicidades, pequeño. 37, 73 o100. Siempre serás nuestro niño.
Felicidades por tu post y por tus 37. Me ha encantado como lo has empezado. Un abrazo
esos 37pasos han dado mucho de si hanservido para subir hasta el techo conel pulso de cariño atodos los infantes cascos y cerros para darese empujon a la vida esas rodillas que sevian como regazo donde mis hijos te convencian que te querian y tu les contestabas que ahi estabas tu . Esa altura de todo . NO VEAS LO LCOS QUE NOS TIENES DESDE AQUEL DIA QUE VINISTES Y ME HICISTES EL REGALO DE SACAR EN TU PIEL ALGO DE LA MIA ESE COLOR
LA ORTOGRAFIA NO ES MUY BUENA PERO ES QUE NOME DEJAN LAS LAGRIMAS VER LAS TECLAS . hal a seguir muchos 37 sin cambiar un apice
Qué poetas se han querido poner todos ahora, eh?!!??
yo con esto de no leer…
Qué no!!! que si leo!!!
Y te contesto con otro de Gil de Biedma:
“Que la vida iba en serio…uno empieza a comprender más tarde…”
Siento llegar tan tarde, yo también andaba haciendo tiempo,
de pronto he sumado algunos días más a estos ya largos años,
a esta talla corta de cuello vuelto.
Es muy interesante cumplir y ver cumplir años en compañía de ciertas sensibilidades,
uno tiene la sensación de no haber perdido el tiempo.
Gracias Ignacio por compartirlo.
Abrumado he quedado.
Gracias a todos
Que bien nos lo pasamos cuando nos juntamos con los amigos y contamos batallitas;
el tiempo nos da experiencia para disfrutar nuestra vida, ¡ay del que mire para atrás con añoranza y no sepa recrearse en su presente!.
Alguien me dijo una vez (estando yo bastante depre): ¡ha llegado el tiempo de que te enfrentes a la vida!, ¡jo! ¡qué acongojo!, menos mal que no hice caso y simplemente fui a ver a mi amiga Prado (psicóloga-hermana) y anda que no disfruto ahora los años que vivo y que viven mis hijos. La vida no es toda de color de rosa, pero ¿a quién le gusta una vida monocolor?, ¡viva el arco iris!. Gracias Carlos por buscar conmigo el tesoro que hay donde éste empieza.
Eso, eso, no miremos hacia atrás.
Miremos a la variedad increíble de colores y de formas que nos rodea, a las charlas con los amigos, a la imaginación de los niños, a la placidez de los ancianos, a las formas caprichosas de las nubes, a la elegancia del vuelo de las aves, y, por supuesto, a la inmensidad infinita del universo que nos acurruca en nuestro quehacer diario.
Pero qué colores tan bonitos se te han puesto, Sonno.
Ah, y felicidades a Ignacio.