
Todo empieza una mañana cualquiera del mes de diciembre de 2012. Una llamada insospechada me comunica que el Departamento de Ciencia de los Alimentos de la Universidad de Copenague está buscando a alguien que se haga cargo de coordinar las actividades de investigación con la industria cárnica, para lo que va a dotar una nueva plaza de “Professor” (catedrático sería a traducción más cercana). Y me dicen que han visto mi curriculum por internet y que estarían interesados en que fuera yo el que la ocupase. Cinco años, cinco.
Tras un período de subida de ego por las nubes y sueños con los ojos abiertos, y después de hablarlo con mi santa, inesperadamente damos un paso adelante. Decidimos saber al menos de qué iba el asunto y estudiar la situación. Me ahorro la descripción de todos estos meses, pero finalmente el 1 de octubre comienzo una aventura en la Universidad de Copenague como “Professor of Food Science with special responsabilities in Meat Technology” (la pagina ha salido en la radio danesa y esta es una traducción de google; no comments).
¿Y eso dónde coloca a lamarga? Bueno, pues tras unos meses de lógica indecisión, y habiendo considerando seriamente la posibilidad de cerrar el chiringuito, he pensado que merece la pena intentar continuar con este espacio e incluir algunas de mis vivencias gastronómico/alimentarias en Dinamarca. A todo esto, la Universidad de Copenague mantiene una estrecha colaboración con Noma, y participa en el “Nordic Food Lab”. Cuando pregunté si cabía la posibilidad de participar en ese ámbito de ciencia y gastronomía, el director del Departamento me comentó que no solo cabía sino que se esperaba. Con lo cual es posible que tenga cosas que contar al respecto de vez en cuando.
Así que empiezo una ruta margarita danesa salpicada de todo aquello que tenga que ver con el comer, diferente en el itinerario de la que en su día inauguró la Reina Margarita (que visita las zonas más pintorescas del país).
La margarita cabalga de nuevo.
El cuadro es “Interior (Strandgade 30)”, de Vilhelm Hammershoi, un pintor Danés que refleja muy bien la luz (mortecina) de estas latitudes.